LOS FONDOS
DE LA HERENCIA NADAL GUERRERO PAGARÁN LA MALA GESTIÓN DE LA COOPERATIVA
AGRÍCOLA
Espacio Verde (EVA) lamenta que la operación cerrada a tres
bandas entre Iglesia Católica,
Cooperativa Agrícola y Ayuntamiento de Estepona contribuye a enterrar
definitivamente cualquier atisbo de revertir el legado Nadal Guerrero al pueblo
de Estepona.
Que la
Iglesia Católica financie una
institución privada, la Cooperativa Agrícola, lejos de suponer un “regalo”
a los vecinos, es su contribución al pozo sin fondo que la citada Cooperativa
ha sido tanto para sus socios como para la regeneración del tejido productivo
agrario de Estepona.
Hace décadas
que la Cooperativa ha dejado de tener la relevancia económica que desde su
fundación animó a los agricultores de la localidad. Actualmente, la venta de
productos en las instalaciones es mínima comparada con cualquier período
histórico, pero también en términos de rentabilidad actual. Hay que recordar
que quedan pocos agricultores dentro de la Cooperativa, la mayoría de sus
socios son personas mayores, alejadas de la explotación agraria y que no han
tenido relevo generacional en las explotaciones. Bien porque han sido
abandonadas, bien porque han esperado otro destino para sus tierras: La
urbanización de las mismas. En este contexto, generando constantes pérdidas,
las nuevas instalaciones prometidas en el Polígono Industrial no conseguirán
cambiar el rumbo de la institución, sino continuarlo.
Lejos de
liderar la imprescindible transformación de nuestros campos en espacios de
agricultura ecológica y biológica, la Cooperativa
Agrícola de Estepona ha sido un mero
intermediario entre el mayorista y el productor, más interesado en el cobro de
las comisiones y el interés del intermediario que en el innegable potencial
de nuestros campos como generador de empleos verdes. Animando a la
revitalización de parcelas en desuso incluso mediante la cesión para su cultivo
a desempleados. Fomentando el
autoconsumo, apostando por la comercialización libre de intermediación
en el mercado local y comarcal, propiciando instalaciones para la
transformación de excedentes para esos mismos mercados. En definitiva, siendo
avanzadilla de una alternativa a la economía del ladrillo y un instrumento para
contribuir positivamente a la lucha contra el paro, la construcción de la
soberanía alimentaria y el contrapunto a las economías del ladrillo y la
destrucción del espacio natural esteponero.
La gestión
de la Cooperativa, en manos de personas con intereses económicos ajenos al
campo y vinculados con la especulación urbanística, alejan a la histórica institución de sus vecinos, y la convierten en
una empresa más, ruinosa empresa, que únicamente busca un interés pecuniario
inmediato y una apuesta especulativa de futuros con bienes públicos, en este
caso cedidos por el Ayuntamiento de Estepona.
Así, la
Iglesia Católica y el Ayuntamiento de Estepona no están “salvando” nada que pueda repercutir en el interés común,
sino que están rellenando con billetes un bidón que seguirá vaciándose
constantemente, quizá sirviendo
exclusivamente a los intermediarios y bieninformados personajes que participen
en las operaciones inmobiliarias.
Espacio Verde se lamenta de la gestión que la Iglesia ha
hecho de un legado que los esteponeros consideraban como propio y que solo ha
servido para el interés de la propia Iglesia y para enriquecer a especuladores
inmobiliarios e instituciones bancarias, y que poco o nada ha repercutido en los
vecinos de Estepona.
Espacio
Verde, además, critica el papel catalizador del Ayuntamiento en la citada
operación. Pues si bien estamos de acuerdo en la necesidad de un pulmón verde
en el centro urbano, recelamos de la
valoración de las parcelas y aprovechamientos cedidos a la Cooperativa
Agrícola, que pueden suponer empobrecimiento del patrimonio municipal del suelo
y enriquecimiento de los socios de la Cooperativa. Hay que recordar que sus máximos dirigentes lo son también del Partido
Popular en el poder. Al mismo tiempo, Espacio Verde se pregunta si el doble
uso previsto para la parcela de calle Terraza, escolar además de zona verde, no
esté preparando otra operación con la
Iglesia Católica como la del Colegio Juan XXIII, que cerraría el círculo de
forma perniciosa para el interés público.
OFICINA DE PRENSA ESPACIO VERDE
Estepona, 30 mayo 2013